La Semana Santa de 2025 se celebrará del domingo 13 al domingo 20 de abril, y su inicio coincidirá con un evento astronómico significativo: la primera luna llena de la primavera, que ocurrirá el mismo 13 de abril a las 12:22 (GMT), según informó el Departamento de Astronomía y Astrofísica de la Facultad de Ciencias Espaciales (FACES) de la UNAH, a través de su boletín informativo.

Este fenómeno no es una coincidencia fortuita.

La fecha de la Semana Mayor la conmemoración más importante del cristianismo está directamente relacionada con los ciclos lunares y la llegada de la primavera en el hemisferio norte. Tal como explicó el M.Sc. Ricardo Pastrana, autor del boletín, la celebración de la Pascua de Resurrección se determina según la primera luna llena posterior al equinoccio de marzo, lo que asegura que la Semana Santa siempre se celebre en la estación primaveral.

Esta relación se remonta al año 525, cuando Dionisio el Exiguo estableció el cálculo del Anno Domini y las reglas para fijar la Pascua. Estas normas establecen que:

La Pascua cristiana no debe coincidir con la Pascua judía.

Debe celebrarse en domingo.

El domingo elegido debe ser el siguiente al primer plenilunio de primavera.

Si ese plenilunio cae en domingo y coincide con la Pascua judía, se traslada al siguiente domingo.

En 2025, el equinoccio de primavera será el 20 de marzo. Si el plenilunio ocurriera al día siguiente (21 de marzo), la Pascua no podría celebrarse entonces, ya que esa fecha caería demasiado cerca de la Pascua judía.

Por tanto, habría que esperar la siguiente luna llena (18 de abril), y si esta cayese en domingo cómo será el caso se aplaza una semana más, fijando la Pascua para el domingo 20 de abril.

Este cálculo complejo desmiente la creencia popular de que Semana Santa puede celebrarse en verano. Siempre ocurre en primavera, lo cual se refuerza con datos astronómicos y calendáricos confiables.

Elaborado por: M.Sc. Ricardo Pastrana

Departamento de Astronomía y Astrofísica, FACES/UNAH