Recientemente la Cancillería de Honduras informó oficialmente que el Gobierno de Nicaragua ha solicitado el beneplácito para designar a Darlyn Ríos como nueva embajadora nicaragüense en el país, en sustitución de Iris Audelly Acuña Huete, quien hasta ahora ostentaba el cargo en Tegucigalpa.

La noticia se da en medio de especulaciones sobre una posible tensión diplomática entre ambos países, especialmente después de la reciente IX Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac). No obstante, el canciller hondureño, Enrique Reina, desmintió tajantemente que el cambio de embajadora tenga relación con diferencias políticas surgidas en ese foro regional.

“No se trata de una retirada por desacuerdos diplomáticos, sino de un relevo normal en la representación de Nicaragua en Honduras”, aclaró Reina, disipando rumores sobre un posible distanciamiento bilateral.

La solicitud de beneplácito un paso diplomático protocolario necesario para oficializar el nombramiento de un nuevo embajador es una práctica habitual entre Estados soberanos, y su tramitación no implica por sí misma ninguna alteración en el estado de las relaciones diplomáticas.

Darlyn Ríos, quien ahora espera el visto bueno del gobierno hondureño, asumiría funciones tras la salida de Acuña Huete, quien ejerció su labor en Tegucigalpa durante un período en el que las relaciones entre ambos países han tenido momentos de tensión, pero también de cooperación, especialmente en temas migratorios y fronterizos.

La aclaración del canciller Reina cobra relevancia en un contexto donde algunos países miembros de la Celac han manifestado divergencias sobre el liderazgo y orientación política del bloque, incluyendo posturas críticas hacia el actuar de algunos gobiernos de la región. Sin embargo, en este caso, Honduras ha optado por no escalar interpretaciones y más bien ha subrayado la continuidad del canal diplomático con el gobierno de Managua.

Por su parte, el gobierno nicaragüense no ha emitido comentarios públicos adicionales sobre la salida de Acuña Huete ni sobre el perfil de la nueva propuesta diplomática, aunque fuentes extraoficiales indican que Darlyn Ríos ha formado parte previamente del cuerpo diplomático nicaragüense en otros países de Centroamérica.

Aunque las relaciones Honduras-Nicaragua han sido tradicionalmente complejas debido a temas históricos como los límites fronterizos marítimos y terrestres, ambos países mantienen embajadas activas y cooperación en varios niveles institucionales. Este cambio de representante diplomática se percibe, hasta el momento, como parte de la rotación habitual del cuerpo diplomático nicaragüense.