La Policía Nacional de Honduras incrementó este lunes la recompensa a 3,5 millones de lempiras (aproximadamente 135.553 dólares) para quien brinde información que permita la captura del general retirado Romeo Vásquez Velásquez, exjefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, acusado del asesinato de un joven en el contexto del golpe de Estado de 2009 contra el expresidente Manuel Zelaya.

Vásquez figura entre los diez hondureños más buscados por diversos delitos, una lista que también incluye a Yulan Adonay Archaga, cabecilla de la pandilla Mara Salvatrucha (MS-13), prófugo desde 2020 y acusado de múltiples asesinatos. La recompensa por Archaga fue elevada al mismo monto que la de Vásquez.

El Ministerio Público acusa a Vásquez, al exsubjefe militar Venancio Cervantes y al excomandante del Comando de Operaciones Especiales Carlos Roberto Puerto por el asesinato de Isis Obed Murillo, joven simpatizante de Zelaya, quien murió el 5 de julio de 2009 de un disparo en la cabeza durante una multitudinaria manifestación en Tegucigalpa. También se les imputa tentativa de asesinato contra Alex Roberto Zavala.

Los tres oficiales fueron capturados en enero de 2024 y enviados a la Penitenciaría Nacional, pero una semana después se les concedió arresto domiciliario. Sin embargo, la Corte de Apelaciones revocó esa medida el 3 de marzo y ordenó su regreso a prisión. Cervantes y Puerto acataron la orden el 18 de marzo, pero Vásquez permanece prófugo.

Desde la clandestinidad, Vásquez ha difundido videos donde acusa a autoridades judiciales y al expresidente Zelaya de persecución política y vínculos con el narcotráfico. Cada nueva aparición pública en video ha motivado a la Policía a aumentar la recompensa en 500.000 lempiras (unos 19.365 dólares), como ocurrió este lunes, cuando señaló a la ministra de Defensa y candidata presidencial del partido Libre, Rixi Moncada, de ser “la delfina de la corrupción del narcodictador Manuel Zelaya”.

Vásquez lideraba el Estado Mayor Conjunto cuando Zelaya fue derrocado por intentar promover una consulta popular para una posible Asamblea Constituyente, iniciativa considerada ilegal por el Poder Judicial de entonces. Su destitución por parte de Zelaya el 24 de junio de 2009 fue revertida por una resolución judicial días antes del golpe.

El exgeneral también ha criticado públicamente al actual jefe del Estado Mayor Conjunto, Roosevelt Hernández, por su supuesta cercanía con Zelaya, y le ha exigido respeto por las Fuerzas Armadas desde su condición de prófugo.