La Misión de Observación Electoral (MOE) de la Organización de los Estados Americanos (OEA) expresó su preocupación por el ambiente político y judicial que rodea el proceso electoral hondureño, a pocas semanas de las elecciones generales del 30 de noviembre, y llamó a garantizar la autonomía, seguridad e integridad de las autoridades electorales.

A través de un comunicado publicado en la red social X, la misión que encabeza el excanciller paraguayo Eladio Loizaga advirtió que las recientes actuaciones del Ministerio Público “debilitan la independencia de los órganos electorales”, luego de que se presentara una solicitud de antejuicio contra dos magistrados del Tribunal de Justicia Electoral (TJE) y se acusara a una consejera del Consejo Nacional Electoral (CNE) por presunta “conspiración” contra el proceso electoral.

“La protección de la integridad personal de las autoridades electorales y la de sus familias es una tarea central del Estado y condición necesaria para un proceso democrático”, señaló la MOE/OEA, instando a las instituciones hondureñas en especial al sistema judicial a garantizar la seguridad y el respeto institucional hacia los funcionarios encargados del proceso.

La misión también exhortó a cesar cualquier acción que “ponga en riesgo la confianza del pueblo en la democracia”, en alusión a los crecientes ataques verbales y acusaciones cruzadas entre líderes de los principales partidos políticos, así como a las tensiones entre el Congreso Nacional, el Poder Judicial y los organismos electorales.

La declaración de la OEA llega en un contexto de alta polarización política. En los últimos días, el país ha sido testigo de disputas entre poderes del Estado: desde el antejuicio solicitado por la Fiscalía hasta la creación de una Comisión Permanente en el Congreso Nacional impulsada por el presidente Luis Redondo, cuya legalidad ha sido desconocida por las bancadas opositoras.

Estos eventos han generado incertidumbre sobre la estabilidad del proceso electoral, mientras la ciudadanía observa con preocupación la falta de consenso entre las instituciones encargadas de garantizar la democracia.

En su comunicado, la MOE/OEA también recordó la importancia del papel técnico que desempeñan las Fuerzas Armadas de Honduras en el traslado y resguardo del material electoral. La misión consideró “fundamental” que el apoyo militar se mantenga dentro de los límites establecidos por la Constitución de la República, tras recientes controversias por declaraciones del jefe del Estado Mayor Conjunto, general Roosevelt Hernández, sobre asuntos que competen exclusivamente al CNE.

“Las Fuerzas Armadas deben continuar brindando apoyo logístico, pero siempre subordinadas a la autoridad electoral”, subrayó la OEA, en referencia al marco legal que dispone que el ente castrense queda a disposición del CNE un mes antes de los comicios.

Finalmente, la misión instó a todos los actores políticos a actuar con responsabilidad y respeto al Estado de derecho, enfocando sus esfuerzos en fortalecer la confianza ciudadana.

“La Misión seguirá observando el proceso con un amplio despliegue nacional y velará porque las elecciones del 30 de noviembre se desarrollen de manera transparente, inclusiva y pacífica”, concluye el pronunciamiento.

La advertencia de la OEA refuerza los llamados de la comunidad internacional a preservar la independencia de las instituciones electorales hondureñas, en medio de un clima político que amenaza con empañar la recta final hacia las urnas.