La candidata presidencial del Partido Libertad y Refundación (Libre), Rixi Moncada, exhortó a los congresistas estadounidenses a visitar Honduras y constatar personalmente cómo se está desarrollando el proceso electoral, luego de que una audiencia en Washington advirtiera supuestos riesgos para la democracia hondureña.

Moncada afirmó que existe información “distorsionada” sobre la conducción del proceso electoral y aseguró que la logística comicial no está bajo control del Poder Ejecutivo, sino en manos de empresas privadas contratadas por los órganos electorales.

La aspirante presidencial explicó que siete compañías privadas son responsables de los servicios logísticos del proceso, lo que según ella demuestra que la Presidenta de la República, Xiomara Castro, no tiene injerencia directa en la operación electoral.

Subrayó que el diseño institucional vigente coloca la responsabilidad del proceso en el Consejo Nacional Electoral (CNE) y el Tribunal de Justicia Electoral (TJE), organismos que aseguró han contado con el apoyo financiero oportuno por parte del Gobierno.

Moncada sostuvo que la visita de congresistas de Estados Unidos permitiría que los observadores “comprueben por sí mismos” que la administración de los servicios electorales no recae en la figura presidencial.

La presidenciable reiteró que Xiomara Castro actúa exclusivamente como garante constitucional del proceso democrático. Aseguró que el Ejecutivo ha cumplido con su papel entregando los presupuestos a tiempo al CNE y al TJE, en contraste dijo con lo ocurrido en administraciones anteriores.

Moncada comparó la situación actual con la de 2021, cuando, según señaló, el presupuesto para el CNE fue aprobado tardíamente. “En aquel periodo, el dinero se entregó hasta noviembre”, afirmó, calificando esa etapa como la de una “narcodictadura”.

La exministra aseguró que, con el financiamiento garantizado y las empresas privadas operando la logística, “el riesgo y el peligro no están en el gobierno central, sino en otros espacios del proceso electoral”. No dio más detalles, pero insistió en que su partido ha respetado la institucionalidad.

Moncada concluyó que la invitación a la delegación estadounidense busca dar transparencia y disipar dudas sobre la integridad del proceso ante la comunidad internacional, en medio de un ambiente político marcado por acusaciones cruzadas entre los distintos actores.