
Protestas en Perú dejan un muerto y más de 100 heridos
17 de octubre de 2025

La ola de manifestaciones en Perú contra el gobierno interino de José Jerí dejó como saldo un muerto y más de 100 heridos, en un conflicto que refleja la creciente tensión política y social en el país. Las protestas, protagonizadas en gran parte por jóvenes de la Generación Z, comenzaron de manera pacífica pero derivaron en enfrentamientos con la policía en diferentes puntos de Lima.
El fallecido, Eduardo Mauricio Ruiz, de 32 años y conocido artista de hip-hop, recibió un disparo en la Plaza Francia, en el centro de la capital. Su muerte ha intensificado la indignación y llevado a los colectivos juveniles a convocar un paro nacional indefinido, exigiendo la renuncia inmediata de Jerí y el cierre del Congreso, al que acusan de corrupción y falta de legitimidad.
“No vamos a permitir que se normalice la violencia y la impunidad. La ciudadanía exige respuestas y justicia”, declararon representantes de los colectivos organizadores de las protestas.
Los enfrentamientos dejaron además más de 100 heridos, entre ellos 55 agentes de la policía y 20 civiles, quienes fueron atendidos en hospitales de la capital. La policía reportó que se encontraron artefactos incendiarios y piedras en varios puntos de concentración, lo que complicó la labor de control del orden público.
El presidente interino José Jerí, que asumió el cargo tras la destitución de Dina Boluarte el 10 de octubre, se ha mantenido firme y ha rechazado las demandas de renuncia, asegurando que su gobierno es necesario para garantizar estabilidad y seguridad en un momento crítico del país.
Analistas políticos señalan que las manifestaciones evidencian un profundo descontento social debido a la percepción de corrupción, falta de transparencia y debilitamiento institucional, y advierten que la situación podría escalar si no se abordan las demandas ciudadanas.
Las autoridades han reforzado la presencia policial en la capital y otras ciudades, mientras los colectivos sociales mantienen la convocatoria a nuevas movilizaciones, lo que mantiene al país en un estado de alerta máxima. Se espera que en los próximos días continúen las negociaciones entre representantes del gobierno y líderes sociales para evitar un agravamiento de la crisis política.



