top of page
Cierre del Gobierno en EEUU provoca despidos, caos y impago militar

11 de octubre de 2025

El cierre del Gobierno federal de Estados Unidos, que este sábado cumple once días, comienza a golpear con fuerza al país. Ya se han registrado los primeros despidos de empleados federales, retrasos en aeropuertos y pasos fronterizos, y se cierne una amenaza inédita: que los militares no reciban su salario a tiempo por primera vez en la historia.

 

El estancamiento político entre demócratas y republicanos ha impedido alcanzar los 60 votos necesarios en el Senado para aprobar alguno de los proyectos de financiamiento temporal.

Con el feriado del lunes, el Congreso no volverá a sesionar hasta el martes 14, cuando los republicanos intentarán por octava vez aprobar su propuesta presupuestaria.

 

El gobierno del presidente Donald Trump dio el paso más drástico hasta ahora: ordenó los primeros despidos de empleados públicos, bajo el argumento de la falta de fondos por el cierre parcial.

Los RIFs (reducciones forzadas de personal) han comenzado”, anunció en la red social X el director de la Oficina de Administración y Presupuesto, Russell Vought.

 

Desde el Despacho Oval, Trump declaró que las reducciones estarán “orientadas a los demócratas” y que buscarán eliminar “puestos innecesarios” como parte de su política de austeridad. En cierres anteriores, los trabajadores habían sido suspendidos temporalmente y reincorporados después, pero esta vez los despidos son definitivos.

 

Los efectos del cierre ya se sienten en aeropuertos y pasos fronterizos.

La falta de personal en el control aéreo ha provocado demoras generalizadas en terminales como Boston, Chicago y Las Vegas. Aunque estos empleados son considerados “esenciales” y deben seguir trabajando, muchos se han ausentado por enfermedad o agotamiento, lo que agrava la crisis operativa.

 

En la frontera con México, especialmente entre Ciudad Juárez y El Paso, se registran largas filas de vehículos y retrasos en el tránsito comercial debido a la reducción de agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP). La parálisis afecta tanto a trabajadores como a turistas y transportistas.

 

El cierre también amenaza con afectar directamente a los 1,3 millones de miembros de las Fuerzas Armadas estadounidenses, que podrían no recibir su salario esta semana si el Congreso no logra un acuerdo antes del miércoles.

De concretarse, sería la primera vez en la historia que los militares dejan de cobrar por un cierre gubernamental.

 

Tanto la congresista demócrata Emilia Sykes como la republicana Jen Kiggans presentaron propuestas para garantizar el pago a las tropas, pero ninguna fue debatida antes de que la Cámara de Representantes suspendiera sesiones por el fin de semana largo.

La crisis también ha alcanzado al sector cultural: los principales museos y galerías de Washington cerrarán sus puertas desde este domingo ante la falta de recursos para operar.

El ambiente político en la capital es de creciente tensión. Los demócratas culpan a Trump de usar el cierre como “arma política”, mientras que los republicanos lo justifican como una medida para forzar recortes al gasto público y eliminar programas como “Obamacare”.

Corte Suprema revisará plan de Trump sobre ciudadanía

Zelenski viajará a Londres para impulsar negociaciones de paz

Papa León XIV llama a unidad tras mártires de Chimbote

bottom of page