Más de medio siglo de ‘The Dark Side of the Moon’ una de las piezas maestras de Pink Floyd
1 de marzo de 2025
El 1 de marzo de 1973, la legendaria banda británica Pink Floyd lanzó The Dark Side of the Moon, un álbum que no solo consolidó su estatus como una de las agrupaciones más innovadoras de la historia del rock, sino que también dejó una huella indeleble en la cultura musical y en generaciones de oyentes.
Desde su lanzamiento, el disco se convirtió en un fenómeno global, marcando un antes y un después en la producción musical. Con canciones como Time, Money, Us and Them y Brain Damage, Pink Floyd exploró temas universales como el paso del tiempo, la codicia, la alienación y la locura, en una obra conceptual que trascendió el género progresivo para convertirse en un referente absoluto de la música contemporánea.
El impacto de The Dark Side of the Moon fue inmediato: alcanzó el número uno en la lista Billboard 200 en los Estados Unidos y se mantuvo en el ranking por más de 900 semanas, un récord sin precedentes. Su icónica portada, diseñada por Storm Thorgerson y el colectivo Hipgnosis, con el prisma refractando un haz de luz, se convirtió en una de las imágenes más reconocibles en la historia del rock.
A nivel técnico, el álbum revolucionó el uso de efectos de sonido, sintetizadores y grabaciones multipista, estableciendo nuevos estándares en la producción musical. La ingeniería de sonido de Alan Parsons y la meticulosa composición de Roger Waters, David Gilmour, Richard Wright y Nick Mason dieron forma a un sonido envolvente y cinematográfico que sigue cautivando a oyentes y músicos por igual.
Décadas después, The Dark Side of the Moon sigue siendo un punto de referencia en la historia de la música. Ha sido remasterizado, reinterpretado en diversos géneros y homenajeado en innumerables ocasiones. Su legado es incuestionable, consolidándolo como una obra atemporal cuyo mensaje sigue resonando en la actualidad.
En 2023, para conmemorar su 50 aniversario, se lanzaron ediciones especiales y se organizaron eventos en todo el mundo, reafirmando su influencia y demostrando que el álbum sigue vigente como una de las creaciones más importantes de la música del siglo XX.
Pink Floyd no solo creó un disco, sino una experiencia sonora y emocional que, medio siglo después, sigue inspirando a nuevas generaciones.