La Gran Movilización de la Victoria de Rixi Moncada llegó a los pueblos ancestrales de la región, reafirmando su compromiso con las comunidades miskitas y tawahkas. Entre selva, ríos y el mar Caribe, estas poblaciones han mantenido su identidad y resistencia frente a décadas de marginación, construyendo un arraigo cultural basado en la lucha por la autonomía, la dignidad y la preservación de su territorio, uno de los más ricos en biodiversidad de Honduras.

Bautizada como “Mamá Tara” —que significa “Mamá grande” en idioma miskito—, Moncada destacó su papel como defensora de estas comunidades y aseguró que profundizará los esfuerzos iniciados por la presidenta Xiomara Castro para la exploración de petróleo en el Mar Caribe, mediante estudios de prefactibilidad. “Ese petróleo no puede ser para sectores privados que buscan enriquecerse. Debe ser para el desarrollo del pueblo miskito y su cultura, para garantizar empleo, educación y bienestar. Dios nos acompaña en este proceso y no dejaremos a nadie atrás”, enfatizó.

Durante su intervención, Moncada criticó duramente el uso que la administración anterior dio a la región: “¿Para qué utilizó la narcodictadura el mar Caribe? Solo para traficar drogas y cocaína. Por eso los responsables están hoy condenados en Estados Unidos”, subrayó.

La candidata aprovechó para denunciar las pérdidas fiscales que afectan a la región y a todo el país. “200 millones de lempiras se pierden anualmente en impuestos que no se pagan en esta alcaldía por la extracción de recursos marinos. A nivel nacional, más de 60 mil millones de lempiras se pierden por leyes que benefician a 10 familias y 25 grupos económicos, controlando el 80% del PIB. Esto es una injusticia que debemos corregir”, afirmó.

Moncada también enfatizó la importancia de aprobar la Ley de Justicia Tributaria como mecanismo para redistribuir la riqueza y garantizar desarrollo en los territorios más olvidados. “Aquí no debería existir una sola familia pobre. Todos deberían tener vivienda digna, acceso a agua potable, electricidad, educación de calidad y atención en salud. La riqueza de Gracias a Dios es suficiente para lograrlo”, aseguró.

Otro de los compromisos de la candidata se centra en la energía eléctrica. Moncada anunció la creación de un sistema público de electricidad en Puerto Lempira, que sustituya el actual modelo privado que no satisface las necesidades de las comunidades. “El único responsable de garantizar el bienestar de la gente es el Estado. Me comprometo a avanzar en este proceso y resolver el problema energético de manera integral”, dijo.

La visita también incluyó encuentros con líderes comunitarios y representantes locales, quienes expresaron sus necesidades en materia de infraestructura, educación y salud. Moncada se comprometió a priorizar proyectos de carreteras, puertos y aeropuertos que conecten la región con el resto del país, facilitando el comercio y la exportación de productos locales, y generando nuevas oportunidades económicas.

Asimismo, la candidata adelantó su interés en impulsar cooperativas locales, proyectos de energías renovables y programas de capacitación técnica para jóvenes y adultos, asegurando que el desarrollo llegue de manera sostenible y equitativa. “El futuro del Sur depende de que todos trabajemos juntos: autoridades, productores y comunidades. Solo así convertiremos nuestro territorio en un verdadero motor de progreso para Honduras”, concluyó

Con esta visita, que representa su tercera movilización en menos de un año al departamento de Gracias a Dios, Rixi Moncada reafirma su apuesta por un desarrollo inclusivo y justo, recordando que históricamente esta región ha sido ignorada por candidatos y gobiernos del bipartidismo. La Gran Movilización de la Victoria busca dejar un mensaje claro: las comunidades ancestrales tendrán voz, protección y oportunidades para prosperar.