En el marco de su gira nacional denominada “La Gran Movilización de la Victoria”, la candidata presidencial de Libertad y Refundación (Libre), Rixi Moncada, visitó este fin de semana el departamento de Islas de la Bahía, donde recibió el respaldo de cientos de simpatizantes que se congregaron para escuchar su mensaje de transformación y justicia social.

Durante su discurso, Moncada señaló las profundas desigualdades que persisten en el archipiélago, contrastando la riqueza natural del Caribe hondureño con las condiciones de vida de sus habitantes. “Roatán es un tesoro del Caribe, pero sus familias siguen sufriendo por la pobreza y el alto costo de vida. No es justo que la abundancia del mar no se refleje en los hogares de los isleños”, expresó.

La aspirante presidencial reafirmó su rechazo a las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico (ZEDE), particularmente al enclave Próspera, al que calificó como una amenaza a la soberanía nacional. “Esta tierra pertenece a los isleños. No aceptamos que se use el argumento del empleo para entregar el territorio. Las ZEDE son una nueva forma de filibusterismo, y bajo mi gobierno no tendrán cabida”, aseguró ante aplausos de los presentes.

Moncada también anunció medidas para promover la equidad económica, destacando la eliminación de la central de riesgo como uno de los primeros pasos de su eventual administración. Según explicó, esta herramienta excluye del sistema financiero a los pequeños productores y emprendedores. “La oligarquía se presta entre sí, mientras el pueblo queda fuera del crédito. Vamos a democratizar la economía y las finanzas para que todos tengan oportunidades reales”, enfatizó.

En materia energética, recordó su gestión al frente de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) y detalló que la actual concesión privada en Roatán vence en 2028.

En ese contexto, propuso que el Estado retome el control gradual del suministro para reducir los costos. “Mientras en el país más de 900 mil familias reciben energía gratuita, aquí los isleños pagan más de 2,500 lempiras por el mismo consumo. Esa injusticia se acabará”, declaró.

La candidata cerró su visita con un mensaje de compromiso hacia las comunidades de Roatán, Utila y Guanaja, prometiendo regresar como presidenta para impulsar proyectos que garanticen desarrollo, empleo y soberanía. “Resistimos y venceremos. Volveré a estas islas para gobernar junto a ustedes, con el pueblo y para el pueblo”, concluyó entre vítores de sus simpatizantes.