Durante el inicio oficial de la campaña de Nasry “Papi a la Orden” Asfura en Tegucigalpa, su esposa, Lissette de Asfura, ofreció un discurso cargado de emotividad, en el que resaltó el papel central de la familia, la fe en Dios y el aporte de las mujeres en la construcción de un mejor país.

Ante una multitud de simpatizantes, Lissette compartió un mensaje personal en el que recordó su vida junto al candidato presidencial. “Dios estuvo con nosotros desde el día en que conocí a Tito, y sé que será el mismo hombre honorable, digno y respetuoso como presidente. Es un gran esposo, padre y abuelo”, expresó conmovida.

En su intervención, subrayó que el motor de Honduras está en los hogares y en la fortaleza de la mujer. “Dios, patria y familia: que nunca se nos olvide que el país se sostiene en esos valores. Las mujeres somos pilares de los hogares y, por tanto, de la nación”, afirmó, llamando a mantener la unidad y la esperanza.

La también madre y abuela destacó que un eventual triunfo de Asfura representará un reconocimiento a las mujeres hondureñas, agradeciendo el respaldo de las candidatas a designadas presidenciales María Antonieta Mejía y Diana Herrera.

Antes de concluir, reiteró que aunque no aparezca constantemente en público, su rol es acompañar y respaldar a su esposo y a la familia. “Para apoyar a Tito lo más importante es salir a votar y cuidar el voto. Gracias a todos en la capital, tienen mi cariño sincero y el de mi familia”, dijo, recibiendo el aplauso de la multitud.

El mensaje de Lissette de Asfura se convirtió en uno de los momentos más emotivos del arranque de campaña nacionalista, reforzando la narrativa de que el proyecto político de su esposo tiene como base los valores familiares y la unidad nacional.