El Consejo Nacional Electoral (CNE) se encuentra en una carrera contra el tiempo tras la renuncia de la empresa Unión Latin Cargo, que había sido adjudicada para encargarse del transporte del material electoral de cara a las elecciones generales del 30 de noviembre de 2025.

Ante este imprevisto, el organismo decidió iniciar un proceso de contratación expedita, con el objetivo de garantizar la distribución del material en los 298 municipios del país sin poner en riesgo el desarrollo de los comicios.

Según fuentes internas del CNE, la empresa adjudicada desistió por motivos logísticos y económicos, lo que generó una urgencia institucional para encontrar un nuevo proveedor en los plazos establecidos por ley. La decisión de optar por una contratación directa o simplificada fue respaldada por los consejeros electorales, bajo el argumento de que se trata de un servicio esencial e impostergable.

“Estamos tomando todas las medidas necesarias para asegurar que el material electoral llegue a tiempo a cada rincón del país. No se trata solo de una cuestión administrativa, sino de garantizar el derecho ciudadano al voto”, expresó un portavoz del CNE, quien aseguró que el proceso se realizará bajo criterios de transparencia y competencia limitada.

La contratación expedita permitirá invitar a al menos tres empresas nacionales con experiencia comprobada en logística y transporte de alto volumen. Se espera que la adjudicación final se realice en cuestión de días, considerando la cercanía del proceso electoral y la magnitud del operativo, que implica el traslado de más de 20 mil urnas electorales, kits tecnológicos y material sensible desde los centros de acopio hacia los diferentes departamentos.

Por su parte, representantes del sector transporte que han colaborado en elecciones anteriores mostraron su disposición para asumir el reto, siempre y cuando se establezcan condiciones de pago claras y anticipos del 50 % del contrato.

Además, exigieron que se solventen las deudas pendientes del proceso electoral primario, advirtiendo que sin ese respaldo financiero sería complicado asumir los altos costos del combustible, mantenimiento vehicular y seguridad de las caravanas.

El retraso en la contratación ha generado preocupación entre analistas políticos y observadores electorales, quienes advierten que una eventual intervención de las Fuerzas Armadas de Honduras (FFAA) para suplir la logística podría comprometer la independencia y credibilidad del proceso.

“Si el CNE no logra resolver a tiempo, se corre el riesgo de que las FFAA asuman más funciones de las necesarias, lo cual no sería ideal para un proceso civil como el electoral”, apuntó un analista consultado.

De igual manera, organizaciones de sociedad civil como Transparencia Electoral y el Instituto Holandés para la Democracia Multipartidaria (NIMD) han exhortado al CNE a manejar el proceso con la mayor apertura posible, publicando los términos del contrato y las empresas invitadas, a fin de evitar cualquier sospecha de favoritismo o uso indebido de fondos públicos.

A pesar de los contratiempos, el CNE aseguró que el calendario electoral sigue en marcha, y que la contratación expedita se realizará conforme al marco legal que permite la agilización de trámites en situaciones de emergencia. “Lo importante es garantizar que el material llegue en tiempo y forma, porque de ello depende la confianza ciudadana en el proceso electoral”, enfatizó la institución.

Con esta decisión, el CNE busca no solo resolver un problema logístico inmediato, sino también reafirmar su compromiso con la transparencia, la eficiencia y la responsabilidad institucional, en un contexto donde cada paso previo a las elecciones será determinante para la estabilidad democrática del país.