Este proyecto de ley considera al feto como producto y establece que será violencia contra la libertad de reproducción de las mujeres prohibir o denegar los servicios de salud para interrumpir el embarazo.

Con esta proyectada ley se pretende legalizar el aborto en casos de embarazo forzado, que es como la ONU cataloga los embarazos no deseados, que se dan generalmente en niñas violadas.

Pero lo más sensible es que con esta ley el médico que se niegue a interrumpir un embarazo incurrirá en el delito de violencia ginecosbtetrica y podrán ser penalizados.

Pero por otra parte, esta proyectada ley legaliza los matrimonios entre parejas del mismo sexo y les permite la adopción de hijos.
Pero, según los analistas, la Ley de Integral contra las Violencias hacia las Mujeres le dará carta de ciudadanía a las organizaciones lesbicogay que es la promesa hechas por el coordinador de LIBRE, Manuel Zelaya Rosales, a los grupos de lesbianas y homosexuales que lo apoyaron en las marchas contra el gobierno de Juan Orlando Hernández.