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Portugal se coronó campeón de la UEFA Nations League por segunda vez en su historia, convirtiéndose en la primera selección en lograrlo, ambas ocasiones con Cristiano Ronaldo como líder indiscutible del equipo. La final disputada contra España fue un duelo de alto nivel y mucha intensidad, decidido finalmente en una tanda de penales donde el único fallo fue el de Álvaro Morata, frenando la racha ganadora de “La Roja”.

España, que había mostrado una dinámica ganadora impresionante desde hace más de dos años, sufrió un duro golpe en Múnich, ciudad donde se disputó el encuentro. La selección española, dirigida por Luis de la Fuente y privada de figuras clave como Carvajal y Rodri, demostró competitividad y talento con jugadores como Zubimendi, Oyarzabal y el joven Lamine Yamal, pero no logró capitalizar sus oportunidades para evitar la prórroga y los penales.

Portugal, con un planteamiento táctico de Roberto Martínez que buscó controlar el medio campo con Vitinha, Bernardo Silva y Bruno Fernandes, encontró en Nuno Mendes y en la experiencia de Cristiano Ronaldo las claves para imponerse. Ronaldo, de 40 años, anotó dos goles cruciales durante el partido, alcanzando 138 tantos como internacional y reafirmando su estatus legendario.

El partido fue muy parejo, con momentos dominados por ambas selecciones. España se adelantó primero con un gol de Zubimendi y luego con Oyarzabal antes del descanso, mientras que Portugal igualó y superó con goles de Nuno Mendes y Cristiano Ronaldo. La prórroga no definió al ganador, y en la tanda de penales la precisión portuguesa fue perfecta, mientras que España sufrió el fallo de Morata, dejando el título en manos lusas.

Este triunfo reafirma el poderío de Portugal en el fútbol europeo y destaca la influencia histórica de Cristiano Ronaldo, quien continúa siendo determinante en grandes finales, además de marcar un aviso a las demás selecciones de cara al Mundial 2026, donde España buscará revancha y Portugal defenderá su prestigio.