DEPORTES

Varias federaciones de aficionados al fútbol han solicitado a la FIFA que impida la realización de partidos de ligas nacionales fuera de sus países de origen, en referencia a encuentros como el Villarreal-Barcelona, previsto por LaLiga EA Sports en Miami, y el Milan-Como, de la Serie A italiana, que podría trasladarse a Perth, Australia.

Según la Federación de Accionistas y Socios del Fútbol Español (FASFE), estas propuestas contravienen los artículos 3 y 6 del reglamento de la FIFA, que regulan los partidos internacionales, y atentan contra los fundamentos comunitarios, culturales y deportivos del fútbol. En conjunto con Football Supporters Europe (FSE), Independent Supporters Council (ISC, Norteamérica) y Football Supporters Association Australia (FSA Australia), FASFE envió el pasado 29 de agosto una carta al secretario general de la FIFA, Mattias Grafström, expresando su firme oposición.

Las federaciones advierten que estos traslados priorizan los intereses comerciales sobre los valores deportivos, desvirtúan la tradición de los clubes y afectan a la afición local. Además, señalan que los viajes de larga distancia implican impactos ambientales y logísticos importantes, y que alterar el calendario de partidos de ida y vuelta compromete la integridad competitiva de las ligas.

El Comité Ejecutivo de la UEFA evaluará la solicitud de la RFEF para que el partido Villarreal-Barcelona, correspondiente a la jornada 17 de LaLiga EA Sports, se juegue en diciembre en Miami, así como la propuesta italiana de trasladar el Milan-Como a Perth, prevista para febrero de 2026 debido a la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Invierno Milan-Cortina.

FASFE concluye que deslocalizar partidos erosiona la identidad cultural de los clubes y desnaturaliza la experiencia de los aficionados, por lo que insta a FIFA y UEFA a defender la integridad y los valores tradicionales del fútbol frente a decisiones con fines exclusivamente comerciales.