Crisis en el sistema de salud de Honduras: mora quirúrgica obliga a suspender cirugías urgentes


3 de diciembre de 2024
3 de diciembre de 2024
La crisis en el sistema de salud pública en Honduras ha alcanzado niveles de alarma, afectando a miles de pacientes que enfrentan largas esperas para acceder a cirugías esenciales.
La falta de insumos médicos, personal especializado y una creciente mora quirúrgica han forzado la suspensión de procedimientos, algunos de ellos clasificados como prioritarios.
En hospitales de referencia nacional, como el Hospital Escuela, San Felipe y el Hospital Mario Catarino Rivas, las salas de cirugía permanecen parcialmente inactivas debido al desabastecimiento de equipos básicos como suturas, anestésicos y material quirúrgico, de igual manera el calvario es constante para miles de hondureños quienes madrugan con la esperanza de encontrar a una solución a sus problemas, derivando en ello frustración y enojo ante la situación que se encuentra al borde del colapso el sistema sanitario nacional.
Según datos recientes proporcionados por el Colegio Médico de Honduras (CMH), la mora quirúrgica en el país supera las 15,000 intervenciones pendientes, una cifra que sigue aumentando cada semana.
Pacientes que requieren procedimientos como apendicectomías, cesáreas y cirugías oncológicas enfrentan demoras de meses, lo que pone en riesgo no solo su calidad de vida, sino también su supervivencia. Para muchos de ellos, las alternativas en el sistema privado son inaccesibles debido a los altos costos, agravando así la precariedad para acceder a los servicios públicos, obligando en la mayoría de los casos recurrir a instituciones privadas.
Médicos y enfermeros han alzado la voz en múltiples ocasiones para denunciar la precariedad del sistema. "Nos enfrentamos a una doble tragedia: la impotencia de ver pacientes que podrían salvarse y la frustración de no tener las herramientas necesarias para actuar", señaló un cirujano del Hospital Escuela, quien prefirió mantenerse en el anonimato por temor a represalias.
El gobierno, a través de la titular de la Secretaria de Salud, Carla Paredes ha reconocido la gravedad de la crisis y anunció planes para agilizar la compra de insumos y reforzar los presupuestos hospitalarios. Sin embargo, estas promesas han sido recibidas con escepticismo por parte de la población y el personal sanitario, quienes exigen soluciones inmediatas.
Organizaciones de derechos humanos han advertido que la situación constituye una violación al derecho a la salud y han instalado al gobierno a priorizar la atención médica en el presupuesto nacional. "Honduras no puede permitirse más muertes evitables por la negligencia en el sistema de salud", expresaron representantes de Derechos Humanos en Tegucigalpa.
En medio de esta crisis, los pacientes y sus familias enfrentan una angustia creciente, mientras los profesionales de la salud trabajan bajo condiciones extremas, intentando salvar vidas con recursos limitados. La mora quirúrgica es solo un síntoma de un sistema que necesita una reestructuración urgente para garantizar la atención médica digna que demanda la población.