El candidato presidencial del Partido Liberal, Salvador Nasralla, lanzó fuertes críticas contra el actual gobierno, asegurando que no concluirá las obras de hospitales y carreteras en curso, debido a que, según él, los recursos han sido desviados para financiar actividades de campaña política.

En declaraciones públicas, el presidenciable señaló que una de sus prioridades al llegar a la Casa Presidencial será dirigir la inversión hacia infraestructura vial, abarcando desde calles principales hasta caminos secundarios y terciarios, con el fin de facilitar el transporte de productos hacia los mercados internos y de exportación. “La acción para desarrollar el país es meter el pisto en la reparación de calles y hacer nuevas, para que la producción pueda fluir y llegar a otros países”, expresó.

Nasralla detalló que su programa de gobierno buscará generar empleo a través del sector construcción, incluyendo un ambicioso plan de vivienda social con unidades valoradas en 8 mil dólares. Estas estarían ubicadas estratégicamente a pocos minutos de las fronteras con El Salvador y Guatemala, lo que, dijo, favorecería la integración comercial y el acceso a servicios.

El candidato también prometió garantizar acceso a internet en todo el país, junto con carreteras en óptimas condiciones, asegurando que los proyectos están listos para su ejecución inmediata en caso de ganar las elecciones.

En cuanto a los costos de obra, comparó que la construcción de carreteras en El Salvador es “diez veces más barata” que en Honduras, acusando que esta diferencia se debe a lo que calificó como “robo monumental” en el manejo de fondos públicos. “Todas las obras están a medias y los recursos se destinan a otros fines. Por eso Libre me ataca, porque sabe quién les va a arruinar el negocio político”, afirmó.

Las declaraciones de Nasralla se dan en medio de un contexto electoral tenso, marcado por acusaciones cruzadas entre los principales contendientes y un creciente debate sobre la transparencia en el uso de los recursos estatales. Con su propuesta, el líder liberal busca posicionarse como el candidato que pondrá fin a la corrupción en la obra pública y dará un impulso sostenido a la infraestructura y al empleo en Honduras.